La bici... otro gran placer...

Bueno, el otro día hablaba del placer de planchar escuchando tu música preferida, y hoy quiero referirme a otro placer también muy sencillo (no tanto, pero en fin...) de disfrutar sobre todo ahora con el buen tiempo.

Los que me conocéis desde hace tiempo sabéis que llevaba años yendo en bici a todas partes. Lo cuál -para el que no se lo imagine- es un poco... mmm.. "engorroso". Es verdad: es ecológico y respetuoso con el medio ambiente, y también te activa la circulación y te fortalece los músculos. Pero por otra parte: te reduce la movilidad, porque hay trayectos medianamente largos o cuesta arriba que ya no te atreves a acometer; y además normalmente -vayas donde vayas- llegas a todas partes un poco "acalorado", sino sudado. Y eso es un poco incómodo. Además, según cómo en algunos sitios o ambientes te miran como un bicho raro, sobre todo si tienes que ir trajeado o medianamente bien vestido. En fin, que llegaba la hora -después de unos cuantos años de pocos miramientos- de pasar al plan B.

Y el plan B ha sido la moto. El coche no, porque a parte de ser más caro en muchos sentidos, para ir por la ciudad tiene los inconvenientes que todos conocemos, que no tienen las motos. En fin, la cuestión es que desde hace dos meses que me muevo en moto. Y la verdad es que ya empezaba a echar de menos la bici. No la había tirado ni regalado, pero estaba siendo cubierta por una capita de polvo "ambiental" en mi balcón.

Hace unas semanas me hice el propósito de no abandonar así ese fabuloso vehículo, y me fijé como meta (un poco vaga, no?) coger de vez en cuando la bici, sobretodo para trayectos cortos y cuando -evidentemente- no tenga mucha prisa.

A donde quiero ir a parar es que ayer eso hice: ir en bici a una oficina de banco que me cae como a 20 minutos de casa andando pero que con el vehículo de dos ruedas apenas son 5 minutos. Y chicos... ufff... qué placer!!!!! ... media mañana, solete primaveral, aire primaveral, viejecitos disfrutando del tiempo por la calle, gente con bolsas de la compra, y yo... con toda mi tranquilidad del mundo (no sé: unos 15km/h) deslizándome calle adelante... mmmm.... sin casco, ni traje, ni prisas.... sobretodo eso: sin prisas...

...muy recomendable.

La única pega: tener espacio para guardar la bici en casa, en el parking, etc.

Si vais a coger la bici o ya lo hacéis, echadle un vistacillo a los consejos prácticos de seguridad que ofrecen en esta web (en catalán):

http://www.collsuspina.diba.es/AnarBicicleta.asp