A una buena amiga

Con este post inauguro este blog, y se lo dedico con un especial cariño a una persona que acabo de conocer y que me ha motivado a empezar aquí. Ella aún no lo sabe, pero lo va a leer mañana o pasado mañana. Es curioso que sea una persona bastante más joven que yo, porque su manera de pensar y de sentir la encuentro tan familiar como si fuera mía. Y así quiero empezar: recalcando -por si alguien aún no lo sabe- que el conocimiento se comparte, se traspasa, se chupa de los demás, de los que viven y de los que vivieron, y que no importa la edad ni el tiempo ni el espacio que nos separen -mucho menos hoy en día- para trabajar juntos por un mundo mejor... y ¿porqué no...? para disfrutar soñando con ese futuro.

A pesar de estas buenas intenciones y de esta positiva ilusión que intento reflejar ahora, me conozco a mí mismo, y sé que mi fuerte no es la disciplina (podré superarlo algún día? ;) Cuando se quiere que los proyectos tengan una larga vida se ha de ser sobre todo: constante. Espero que el hecho de iniciar el blog -como algo público que es- estimule mi responsabilidad para perseverar en la calidad de lo que escriba. Y eso significa, amigos: VIVIR MUCHO Y MUY INTENSAMENTE! (jejejeje... la frase la leí en no se sabe donde de no se sabe quien... pero siempre me la he hecho mía, espero que os guste también).

Ahí quedáis todos invitados/as :)
Un saludote!